Carlos Landi en Segovia

Carlos Landi Sorondo, pintor y cartelista, nació en Tolosa (Guipúzcoa)en 1896 falleciendo en San Sebastián en 1974. Era hijo de Miguel Landi y Merli (Florencia) y de Juana Sorondo y Jaime (Villabona, Guipúzcoa)

Carlos Landi pertenecía a la que llamamos "La generación perdida" junto con los pintores vascos Julián Tellaetxe, Ascensio Martiarena, Eduardo Lagarde, Jesús Olasagasti, Nicolás Lekuona y José Manuel Aizpurua.

Realizó una serie de acuarelas de Segovia y editadas por Gráficas Laborde y Cabayen de Tolosa.

Arco de la Fuencisla

Casa del Condestable Don Alvaro de Luna

El Acueducto

Plaza del Obispado

La Catedral

Plaza de Juan Bravo

El Alcazar

Monasterio del Parral

Carlos Landi, la generación perdida

La llamada tercera generación de pintores vascos o generación perdida fue un grupo de artistas que apostaba por la modernidad y cuya trayectoria truncó, como la de otras tantas vidas, la Guerra Civil. Los pintores Carlos Landi, Julián Tellaetxe y Ascensio Martiarena tuvieron que exiliarse. Eduardo Lagarde y Jesús Olasagasti marcharon al frente. Nicolás Lekuona murió en un bombardeo. El arquitecto José Manuel Aizpurua, buque insignia de todos ellos, falleció fusilado. Los que se quedaron, además de la tristeza por la ausencia de sus compañeros, se enfrentaron a la imposición franquista de un arte poco comprometido, porque el régimen vinculaba las vanguardias a la República, que las había utilizado como escaparate propagandístico en Europa.

María Jesús López de Sosoaga

Irún y Fuenterrabía bajo la mirada de Didier Petit de Meurville

Didier Petit de Meurville nació en Haití en 1793. Su padre falleció en la revuelta de esclavos de 1795, por lo que se tuvo que trasladar con el resto de su familia a Boston. Algunos años mas tarde la familia se instaló en Lyon. Didier se dedicó al comercio de la seda y se relacionó políticamente con sectores legitimistas. Al final de la Primera Guerra Carlista ayudó a los exiliados carlistas en Francia, llegando a intimar hasta el punto de realizar retratos de Don Carlos, su familia, Cabrera y varios de los que siguieron al pretendiente a Bourges. Su apoyo fue recompensado por Don Carlos nombrándole vizconde del Amparo en 1845.En 1848 ingresa en la carrera consular y es nombrado vicecónsul en Alicante. En 1857 solicita el traslado y se instala como Cónsul en San Sebastián. Durante los 16 años que desempeñó su cargo en la capital guipuzcoana siguió desarrollando su afición por la pintura realizando numerosas ilustraciones y cuadros de paisajes de la ciudad y su entorno. Dedicó especial atención a la flora de la provincia cuya descripción se recoge en tres álbumes de ilustraciones de gran calidad. Petit de Meurville falleció en Biarritz en 1873. (Extraído de www.albumsiglo19mendea.net/petitdemeurville/biographie.php









Hendaya - Fuenterrabía - Gouache - 12 x 15 cm - Colección Javier Satrústegui










Frontera de Irún - Tinta china 10,5 x 17 cm. - Colección Javier Satrústegui






Irún, 1855 - Lápiz realzado con gouache 14,2 x 30 cm. - Colección Javier Satrústegui








Irún - Gouache 13 x 16 cm. - Biblioteca Real








Fuenterrabía, 1858 - Lápiz realzado con gouache 14,2 x 30,3 cm. Colección Javier Satrústegui




Fuenterrabía, 1858 - Lápiz realzado con gouache 14,2 x 30,3 cm. Colección Javier Satrústegui

Fuenterrabía - Gouache 12 x 15 cm. Colección Javier Satrústegui

Jesús Olasagasti, "pintor y dinamizador de la vida artística de San Sebastián". Intruducción del catálogo por Mª Jesús Lopez de Sosoaga Betolaza

Cuando hablamos de Jesús Olasagasti siempre le recordamos como "pintor de retratos" y de esta temática nos ha dejado obras magistrales merecidamente alabadas por diversos críticos de arte como Ramón de Faraldo, Llano Gorostiza, Luis de Castresana, Lafuente Ferrari y otros. Pero Olasagasti también fue uno de los personajes más populares de la intensa vida cultural que se vivió en San Sebastián en los años treinta, y que no solamente se dedicó a la pintura, sino que tuvo un protagonismo importante en todos los acontecimientos que se realizaron en la ciudad.

Gonzalo Manso de Zuñiga 1951 (Óleo sobre lienzo 81 x 65 - Museo San Telmo, Donostia Kultura)
Dtor. del Museo de San Telmo

La recogida de la manzana 1930 (Óleo sobre lienzo 140x120 - Patrimonio Artístico Kutxa)

En esta época frecuentó el estudio de los arquitectos Aizpurúa y Labayen, y con Carlos Ribera trató de hacer realidad una revista literaria. En estos años se relacionó con Sánchez Mazas y Gregorio Marañón, conoció a Giménez Caballero y a Eugenio Montes y fue amigo de Camilo José Cela.

Como artista fue quien mejor recibió la experiencia poscezanniana de Vázquez Díaz al tratar de aplicar el cubismo a la figuración como lo estaba haciendo en Vizcaya Aurelio Arteta, dentro de la corriente geometrizante que estuvo vigente en el periodo de entreguerras europeo. Olasagasti formó parte del grupo de pintores guipuzcoanos que desde los años veinte hasta la guerra civil pintan con un lenguaje moderno, lo que supone en la historia de la pintura vasca el eslabón entre la pintura etnográfica del periodo precedente y la pintura de vanguardia de los años treinta, " y ¿por qué no decirlo? de borrón y cuenta nueva" como dijo Flores Kaperotxipi con respecto a la pintura anterior. Jesús Olasagasti es uno de los pintores que fueron a París en busca de otras corrientes modernas deseosos de liberarse del realismo costumbrista, y que más se aproximaron a la vanguardia europea aunque atenuando sus avances estéticos.

Árboles y senda 1946 (Óleo sobre lienzo 38 x 48 - Patrimonio Artístico Kutxa)

Futbolistas en la playa 1954 (Óleo sobre lienzo 60 x 48 - Patrimonio Artístico Kutxa)

Los sucesivos premios en las Exposiciones Noveles y la diversidad de sus primeros momentos hicieron ver en él a la nueva promesa de la pintura vasca, pero después de la Guerra Civil el único lenguaje pictórico posible era la figuración y eligió el retrato como pintura de supervivencia.

Amigo de sus amigos, gran conversador, ingenioso e irónico, liberal y tolerante. Sus contradicciones, quizás un éxito precoz, o el dedicarse a una pintura acomodaticia que en el fondo no le complacía, le hicieron abusar del alcohol, lo que fue minando su salud y precepitó su muerte acabando prematuramente con su carrera artística.

Maravilloso Catálogo de Jesús Olasagasti

Gracias Gloria y Ramón, efectivamente la Kutxa funcionó de maravilla enviandome el catálogo rapidamente.

Al fín he podido desvelar la autoría de mi apreciado tesoro, una vida muy apasionante.

Gracias de nuevo.

Jesús Olasagasti

Este es mi tesoro

Jesús de Olasagasti

¿Quién fue Jesús de Olasagasti?
Siempre se llega al conocimiento de las personas por detalles mínimos, pero que con el paso del tiempo se van aclarando, siempre y cuando uno tenga interés en conseguirlo.
En mi juventud y a través de una tía mía, Mari Ituarte, recibí el regalo de un dibujo a lapiz de un pintor de San Sebastián, yo sólo sabía por ella que se trataba de un amigo suyo que le había obsequiado con él.
Siempre lo tuve guardado como un tesoro, pero no sabía nada más de él.
Se trataba del dibujo de un maniquí y lo había titulado como "Recuerdo de aquél maniquí"
Con motivo de la edición de un libro dedicado a José María de Ucelay me entero que Jesús era conocido y contemporaneo de él y es entonces cuando decido investigar en internet. En ese momento es cuando me doy cuenta de la magnitud del regalo. ¡Impresionante!